Accidentes son frecuentes entre adolescentes y adultos.
Este tipo de lesiones ocurre principalmente en adolescentes y adultos jóvenes que no estiman la profundidad del agua o la existencia de rocas.
Un mal piquero puede producir lesiones en la columna que pueden derivar en Paraplejia (parálisis de la parte inferior del cuerpo) y Tetraplegia (parálisis total o parcial de brazos y piernas) o pérdida parcial de la movilidad. Igualmente las lesiones en la cabeza pueden generar daño cerebral, pérdida de habilidades motoras, problemas de lenguaje, entre otras. Todas estas lesiones son prevenibles si sigues estos simples consejos.
Para prevenir accidentes en playas y piscinas
- No correr por el borde de la piscina.
- No bañarse en lugares prohibidos o cuando se indique bandera roja.
- No bañarse en zonas establecidas para deportes acuáticos o de navegación.
- No bañarse bajo los efectos del alcohol.
- Si no tiene conocimientos específicos de las técnicas para realizar piqueros, no lo haga.
- Evitar juegos bruscos en playas y piscinas.
- Evitar realizar saltos desde alturas como árboles, miradores, roqueríos, etc.
- Usar chalecos salvavidas durante la navegación.
- Los niños siempre deben estar acompañados por una persona adulta en playas y piscinas.
- Instalar rejas o protecciones alrededor de las piscinas para controlar el ingreso de los niños.
Si la persona ya se accidentó:
- No mover al accidentado hasta inmovilizar el cuello. Si esta inconsciente asumir que puede tener fractura cervical hasta que se demuestre lo contrario, por lo que las maniobras de reanimación deben ser considerando este cuadro.
- Siempre moverlo en bloque entre varias personas.
- Contactar lo antes posible a un servicio de urgencias.
- Tranquilizarlo acompañándolo.
- Darle la información relevante. Es decir, qué se está haciendo, dónde irá etc. No corresponde emitir opiniones de diagnóstico al paciente en ese momento.
La información ha sido obtenida de fuentes oficiales de acceso público que pueden ser consultadas para obtener más antecedentes: